El uso de materiales reutilizables y de larga durabilidad es uno de los principales pilares para poner en práctica un interiorismo sostenible en donde se aplique la economía circular. En el caso de la decoración, estos materiales pueden ser naturales. Encontramos el algodón, el lino, la lana; pero, sobre todo, la madera.
Un tipo de madera reconocido en este sentido es el bambú. Este material no es solo utilizado para la decoración: es antibacteriano, tiene resistencia, flexibilidad y crece rápido. Pero lo más importante, debido a estas condiciones, es un material de madera perfecto para los criterios de sostenibilidad y economía circular.
Para la decoración, tanto el bambú como otros tipos de maderas sirven para darle otro toque de belleza al ambiente a través de: muebles, estanterías, persianas, muebles de exteriores, cestas, etc. El estilo que aporta la decoración en madera es llamativo, ligero y elegante. Un estilo, también, sostenible.